viernes, 19 de junio de 2009

The Carnival is Over...

(((Outside... the Storm clouds are gathering...)))
The Carnival is Over...

Cada segundo del día estuvo cubierto de gruesos nimbos... Obscuros nubarrones, presagios infalibles de una tormenta que caería en cualquier momento, sin anunciarse, a la espera del instante preciso en que una tibia confianza envolviera sus precauciones y los dejase indefensos, completamente a su merced...

Ese instante no llegó mientras volaron... sin embargo el Cielo nunca dejó de rociarlos con un persistente recordatorio de su ineludibilidad: una fina llovizna tan refrescante como cegadora...

Fue por la noche... Después de que, Maestro y Aprendiz, hubiesen replegado sus alas e improvisado un lecho muelle entre la hojarasca del Bosque Silencioso; cuando Hypnos los arrullaba con viejas canciones que narraban las correrías de osados navegantes surcadores de cielos insondables, cercanos al sol y las estrellas, cielos repletos de criaturas inverosímiles y nubes ambarinas... Fue por la noche cuando el Cielo rompió el cerco que aprisionaba los Miedos y les dejó caer a tierra, hambrientos y desesperados, sobre la Aprendiz y su Maestro... Éstos se aprovecharon de la desnudez de la Aprendiz y se apresuraron a morder ferozmente sus recuerdos y sus certezas... Despedazaron su sueño sin clemencia y la arrastraron por las lágrimas hasta la fría ribera de la vigilia...

Con estertores dolorosos y en un sollozo tremulante llamó a su Maestro quien, en medio de una impotencia frustrante por falta de recursos, sólo pudo ofrecerle un caldo tibio hecho a base de besos tiernos y un ramillete de caricias... En vano corrió por senderos sinuosos con el firme propósito de dar caza a los agresores pues no tenía la menor idea de su aspecto, aroma o consistencia. Cuando volvió al lado de su Aprendiz para preguntar las señas de los perseguidos se encontró con que ella había levantado una infranqueable muralla de silencio que no pudo traspasar... Recargó su conciencia y sus mejores deseos contra el obstáculo y se sentó a esperar el instante en que éste se derrumbe... quizá mañana... quizá nunca...

- Ahora volveré a dormir- dijo una voz tersa, aún transida de llanto, al otro lado del muro...
- ...
- Sí, Maestro, estoy segura- respondió la Aprendiz a la pregunta que adivinó en el silencio de su protector...
- ...
- ** ***...
- y yo a ti, Querida Aprendiz...

(((I remember when you held my hand...)))

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